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En el sur de España es tiempo de ver cómo van tomando volumen melones y sandías que comenzarán a entrar en las despensas españolas y europeas en el último tercio del mes de abril.
Se trata de un ciclo corto de cultivo, al igual que ocurre con otras cucurbitáceas ya sean pepinos o calabacines, y aprovechar una primavera de buenas temperaturas antes de que entre el verano y se pase a otro ciclo.
Esta brevedad de tiempo ha hecho crecer en el subconsciente agrícola una serie de falsas creencias sobre el control biológico que se pueden condensar en una sola: el uso de insectos auxiliares para este tipo de cultivos cortos no es efectivo y, en consecuencia, no es necesario.
Unos axiomas que vuelan de boca a oreja en los campos y que provocan el uso de tratamientos fitosanitarios que echan al traste el buen trabajo logrado en el anterior cultivo si se usaron técnicas de control biológico. La consecuencia es que estos tratamientos ponen en riesgo el siguiente cultivo de otoño una vez sean arrancadas las plantas del presente.
Por eso, todos los colaboradores y expertos -entre los que se encuentra la Fundación Cajamar- que apoyan la campaña I Love Bichos, de Hortyfruta, para fomentar el control biológico en los campos del sur español, vieron muy conveniente desmentir una serie de creencias populares en torno al innecesario uso de control biológico en los cultivos cortos de primavera.
Bajo el eslogan #BichosEnPrimavera, cosecha de primera, Hortyfruta, las empresas, organismos y entidades colaboradoras quieren hacer ver la necesidad de introducir insectos auxiliares en los cultivos para poder completar una campaña sin anomalías y seguir obteniendo unas cosechas saludables bajo un modelo de sostenible.
Entre las falsas creencias que circulan, figuran estas diez:
Frente a estos diez “fakes” del control biológico, los técnicos y expertos parten del siguiente axioma irrefutable:
“Aquel que haya usado insectos auxiliares finalizará su cosecha con muchos enemigos naturales y muy pocas plagas. Y, por el contrario, aquellos que usan solo tratamientos hasta tener su cosecha asegurada, finalmente terminan con enormes cantidades de trips, mosca blanca, etc., que suponen además un foco de infección para los vecinos”
Jan van der Blom, responsable del Departamento de Técnicas de Producción de COEXPHAL, entomólogo y uno de los grandes expertos en control biológico, “si se finalizan los cultivos de una finca con muchos insectos auxiliares, se presta un servicio muy importante al entorno, a los vecinos y al propio agricultor, ya que se genera fauna auxiliar que actúa también después de finalizados los cultivos de primavera, es decir, en el próximo cultivo”.
Para que la campaña fuera lo más didáctica posible, los técnicos y expertos de las empresas y entidades colaboradoras van desmontando con argumentos cada uno de los mitos falsos en una serie de vídeos cortos que se están difundiendo a través de los medios y redes sociales de HORTYFRUTA y colaboradores de I Love Bichos.
La campaña puede seguirse en las siguientes redes: Facebook, Twitter e Instagram
La campaña I Love Bichos Cultivos Naturalmente Protegidos cuenta con la colaboración y el trabajo de las principales empresas de control biológico:
Y también otros organismos y entidades como:
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