
27 June 2025
Entre enero y abril de 2025, el comercio agroalimentario español continúa con la evolución positiva que viene marcando desde principios de año, tanto por el crecimiento en valor de las operaciones como por las diferencias en los volúmenes intercambiados.
Las exportaciones agroalimentarias han alcanzado en este periodo un valor de 26.884 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 5,63 %. Este aumento viene acompañado de un crecimiento del 5,97 % en el volumen exportado, que se sitúa en 13.107 miles de toneladas. Esta evolución refleja la expansión real del sector exportador, donde el incremento en valor va acompañado de un aumento proporcional en la cantidad exportada. Además, el precio aparente de exportación se mantiene prácticamente estable, pasando, en el periodo analizado, de 2,06 €/kg en 2024 a 2,05 €/kg en 2025, lo que refuerza la idea de estabilidad en los precios medios de venta al exterior, en valores históricamente altos.
En contraste, las importaciones agroalimentarias suman 19.144 millones de euros, con un crecimiento interanual del 8,33 %. Sin embargo, este aumento en valor se produce en un contexto de descenso del volumen importado, que cae un 8,77 %, situándose en 16.030 miles de toneladas. Esta evolución dispar entre valor y volumen se traduce en un fuerte incremento del precio aparente unitario de los productos importados, que ha pasado de 1,01 €/kg en 2024 a 1,19 €/kg en 2025, lo que supone un incremento del 18,7 %. En este caso la evolución no se debe tanto a un proceso de inflación, sino a que en 2024 pesaban mucho sobre este precio medio los altos volúmenes que se estaban importando de productos de bajo precio unitario como cereales (que en 2025 caen un 18 % y tienen un precio unitario de 0,256 €/kg) o semillas oleaginosas (que caen un 22 % y tienen un precio unitario de 0,662 €/kg).
Como resultado de estas dinámicas, el saldo comercial agroalimentario español en términos de valor es de 7.740 millones de euros, ligeramente inferior al registrado en el mismo periodo del año anterior (–0,51 %). Más significativa es la evolución del saldo comercial en volumen, que arroja un déficit físico de 2.923 miles de toneladas, lo que supone una mejora del 43,82 % comparada con los primeros cuatro meses de 2024. Esta reducción del déficit en términos de cantidad indica una dependencia menor del exterior.
Principales productos
Durante los primeros cuatro meses de 2025, el comercio exterior agroalimentario español ha mostrado dinámicas diferenciadas tanto en las exportaciones como en las importaciones según el tipo de producto.
En el ámbito exportador, se ha registrado un crecimiento generalizado en el valor global, con las hortalizas y frutas como principales motores, alcanzando los 4.526 y 4.043 millones de euros respectivamente. Las hortalizas han experimentado un aumento del 9,3 % en valor, a pesar de una ligera caída en volumen (-0,4 %), lo que apunta a un encarecimiento del producto. En el caso de las frutas, el crecimiento es más equilibrado, con un 12,2 % más en valor y un 4,5 % en volumen, consolidándose como pilares fundamentales de la balanza comercial agroalimentaria.
El sector cárnico también ha tenido un desempeño sólido, con exportaciones por valor de 3.594 millones de euros y aumentos tanto en valor (+6,4 %) como en volumen (+2,6 %), reflejo de una demanda internacional consistente. Asimismo, otros productos como las bebidas, conservas y preparaciones alimenticias muestran una evolución positiva en ambos indicadores.
No obstante, algunos productos reflejan debilidad. Las grasas de origen animal y vegetal han reducido su valor exportado un 17,1 % pese a crecer un 5,3 % en volumen, evidenciando una significativa caída de precios. Fenómenos similares se observaron en los azúcares (-3,6 % en valor, +12 % en volumen).
Por el contrario, ciertos productos continúan experimentando incrementos especialmente marcados. El cacao, cuyas causas apuntábamos en el informe del mes pasado, destaca con un alza del 67 % en valor y del 6 % en volumen. Las semillas oleaginosas también muestran una mejora notable (+41 % en valor y +121 % en volumen). Igualmente, las harinas (+9,9 % en valor y +23 % en volumen) y los cereales (+3,5 % y +14,8 %) reflejan un momento favorable para las materias primas.
En cuanto a las importaciones agroalimentarias, el comportamiento es igualmente diverso. Los pescados se consolidan como el principal producto importado, con 2.504 millones de euros y crecimientos del 12,9 % en valor y del 4,7 % en volumen. Le siguen las frutas, que con 1.851 millones de euros registran aumentos del 21,4 % en valor y del 2,9 % en volumen, reflejando también un encarecimiento.
Por el contrario, los cereales y las grasas animales y vegetales experimentan fuertes descensos: -11,4 % y -18,1 % en el primer caso, y -12,3 % y -14,9 % en el segundo, contrastando con la evolución observada en sus exportaciones. En el caso del cacao, las importaciones prácticamente se han duplicado en valor (+98,5 %) y aumentan un 15,7 % en volumen, en línea con la presión alcista de los mercados internacionales. El café muestra un comportamiento similar, con un alza del 43,9 % en valor y una variación casi nula en volumen (+0,6 %), evidenciando una fuerte subida de precios.
Principales orígenes y destinos
Durante los primeros cuatro meses de 2025, las exportaciones agroalimentarias españolas han mantenido una evolución positiva, con un valor total superior a los 23.700 millones de euros. Este dinamismo responde, en gran parte, al comportamiento sólido del mercado comunitario, especialmente de países como Francia (4.048,5 M€, +3,9 %), Alemania (3.427,9 M€, +10,5 %), e Italia (2.628,6 M€, +0,8 %), que encabezan el ranking de destinos. También destacan Portugal (2.550,7 M€, +6,5 %) y Reino Unido (1.976,5 M€, +2,9 %), consolidando a Europa Occidental como el principal destino de las exportaciones españolas.
En términos de volumen, las cifras refuerzan esta tendencia: Francia importó más de 2,3 millones de toneladas de productos españoles, seguida de Alemania (1,8 Mt), Portugal (1,5 Mt) e Italia (1 Mt). En todos estos países se observa un crecimiento interanual del volumen superior al 3 %, lo que sugiere una demanda estable y creciente de alimentos y bebidas españoles en el entorno europeo más próximo.
Fuera del espacio europeo, el análisis revela una mayor diversificación de los destinos. Destacan Marruecos, con un crecimiento del 34 % en valor y del 39 % en volumen, y Corea del Sur, que experimenta un incremento del 26,3 % en valor y un notable 68,8 % en volumen, lo que refleja el éxito de las exportaciones españolas en nuevos mercados asiáticos. China, por su parte, continúa con su papel como socio estratégico con un aumento del 17,6 % en valor y del 5,6 % en volumen. El comportamiento de las exports a China y Corea del Sur en este primer cuatrimestre difiere en volumen y valor, pues si bien en ambos mercados aumentan nuestras exports de carne, en China descienden las de semillas oleaginosas (de ahí que en China estemos creciendo mucho más en valor que en volumen), que estarían creciendo con fuerza en Corea del Sur (ocasionando que el crecimiento en valor sea sensiblemente menor que en volumen).
Sin embargo, no todos los mercados han mostrado un comportamiento favorable. Las exportaciones a Japón se redujeron un 3 % en valor y un 3,3 % en volumen, mientras que, en Estados Unidos, aunque el volumen creció un 2,7 %, el valor cayó un 4,4 %, en parte como consecuencia de la caída en valor de las exportaciones de vino y aceite, tal y como se puede ver en 'Los efectos de la guerra arancelaria se empiezan a ver en las exportaciones de vino y aceite del mes de abril'. También se registraron caídas en volumen en países europeos como Polonia (-9,3 %), Suecia (-10,1 %) y la República Checa (-5,5 %), a pesar de variaciones positivas en valor en algunos de estos casos.
Por otro lado, en lo que respecta a las importaciones agroalimentarias españolas, Francia se mantiene como el principal proveedor (2.398,2 M€, +5,6 %), seguido de los Países Bajos (1.497,1 M€, +13,4 %) y Alemania (1.157,8 M€, +10,4 %). Portugal e Italia completan el grupo de principales socios comunitarios, aunque en el caso portugués se observó una ligera caída del 0,6 % en valor y del 2 % en volumen.
El análisis también revela una mayor dependencia de proveedores extracomunitarios, destacando el papel creciente de Estados Unidos, cuyas exportaciones agroalimentarias hacia España aumentaron un 46,2 % en valor y un sorprendente 170,6 % en volumen, consecuencia directa de un gran incremento de exportaciones de maíz (y en orden de magnitud inferior, sorgo) a España. Efectivamente, en 2025 se estaría produciendo un claro cambio en los orígenes de las importaciones españolas de maíz, donde EEUU e incluso Canadá estarían ocupando el lugar que deja el fuerte descenso de los envíos desde Ucrania (y en menor medida otros países del este europeo). Brasil, China, Perú, Chile y Ecuador también registraron aumentos significativos tanto en valor como en volumen, reflejo del fortalecimiento de los flujos comerciales con América Latina y Asia.
Comercio exterior por Comunidades autónomas
A la hora de analizar el comportamiento por comunidades autónomas, destaca el papel de Andalucía, que mejora respecto al mismo periodo de 2024 con incrementos del 3 % en valor y del 8,2 % en volumen. Le siguen Cataluña y la Comunitat Valenciana, que también muestran crecimientos sólidos.
Si bien el crecimiento exportador es una constante en muchas regiones, algunas han destacado especialmente. Es el caso de la Región de Murcia, Navarra o el País Vasco, que han experimentado subidas notables tanto en valor como en volumen. Incluso comunidades más pequeñas como Canarias y Cantabria presentan avances significativos, aunque desde cifras absolutas menores. Por el contrario, Extremadura y Castilla y León presentan cierta debilidad en sus cifras de exportación, con caídas en valor que contrastan con los aumentos en volumen.
Ahora bien, cuando se observa la evolución de las importaciones agroalimentarias, el panorama cambia sensiblemente. Aunque Cataluña continúa siendo la comunidad que más productos agroalimentarios importa, esta cifra viene acompañada de una caída del 10,4 % en volumen. Otras regiones, como Madrid, la Comunitat Valenciana o Galicia, muestran comportamientos similares: aumentan sus importaciones en valor pero reducen o estancan el volumen importado.