Ensayos de polinización en sandía

La sandía es un cultivo tradicional de ciclos de primavera/ verano. Destacan como principales centros de producción las comunidades de Andalucía, Castilla la Mancha, Comunidad Valenciana y Región de Murcia.

Almería reúne una amplia superficie de cultivo a nivel nacional, el 80% de ella protegida. La sandía es un cultivo muy dinámico que se caracteriza por haber incorporado sistemas como el injerto, y por haber desarrollado una importante renovación varietal adaptándose en todo momento a los gustos del consumidor: se están produciendo sandias de tamaño adaptadas a unidades familiares cada vez formadas por menos individuos, fundamentalmente sin semillas. Pero estas sandias triploides presentan el hándicap de la polinización, al no ser su polen viable.

La polinización del cultivo de la sandía se realiza mediante la introducción de colmenas de abejas. 

Las sandias sin semilla (“triploides”) carecen de suficiente polen fértil para poder autofecundarse, recurriéndose a sandías con semillas o diploides que proporcionen el polen viable para la correcta fecundación. Normalmente, se dispone de una línea de plantas diploides por cada dos o tres líneas de triploides (33%-25 % de polinizador) o bien, se intercala la sandía diploide en las líneas de las sandías triploides.

En los últimos años se están desarrollando plantas polinizadoras sin fruto o de fruto desechable que aseguren la polinización y la fecundación permitiendo plantar toda la superficie de cultivo de sandía triploide (sandía sin semilla).

El objetivo del ensayo es comparar dos estrategias de polinización en sandía comparando polinización estándar con sandias con semilla vs. Polinizadores de fruto desechable.

Se compara con otras parcelas donde se emplean plantas polinizadoras de fruto desechable como portadora del polen viable, plantas que se pueden arrancar una vez realizada la polinización, permitiendo cultivar así el 100 % de la superficie de sandia triploide (sin semilla), más demandada por el consumidor.