El ser humano siempre ha sentido curiosidad por lo desconocido. Desde la antigüedad, hemos explorado tierras lejanas en busca de nuevos alimentos con nuevas texturas y sabores.

Las frutas, con sus variadas formas, colores y sabores son un claro ejemplo de ello. En los últimos años, el interés por las frutas exóticas ha crecido exponencialmente, convirtiéndose en una auténtica tendencia.

Hace apenas unas décadas, encontrar frutas como la piña, el aguacate o el mango fuera de sus regiones de origen era todo un lujo inaccesible para muchos. Sin embargo, gracias a la globalización y los avances en transporte y cultivo, muchas de estas frutas han pasado a ser habituales en nuestras mesas y supermercados.

Las redes sociales también han jugado un papel clave, popularizando recetas y estilos de vida que incluyen estas frutas llenas de color y sabor.

Aunque conocemos muchas frutas exóticas y tropicales, existen multitud de ejemplares extraños y sorprendentes de las que puede que no hayas oído hablar.

A continuación, te mostramos una selección con algunas de las frutas más raras del mundo que debes conocer.

Qué se puede considerar una fruta rara

Lo que consideramos raro siempre va a depender nuestro punto de vista. Para alguien en Europa, un rambután puede parecer una fruta exótica, mientras que en Asia es tan común como una manzana.

Por el contrario, una fruta que en Occidente consumimos habitualmente, como la granada, podría resultar inusual para personas de otras culturas.

Además, el concepto de rareza cambia con el tiempo. Frutas como la pitahaya fueron antaño consideradas como exóticas y poco comunes, pero su creciente popularidad ha hecho que se conviertan en habituales en los mercados de muchos países.

Aquí hemos seleccionado diez frutas que destacan por alguna característica única o llamativa que las hace realmente raras.

1. Fruta de Hala

También llamada Hala aka Puahala, pandanus o fruta tornillo, es una rareza tropical que parece salida de otro mundo.

Originaria de las islas del Pacífico, especialmente de Hawái y Micronesia, es una fruta con una llamativa apariencia, compuesta por un conjunto de segmentos llamados llaves, que se desprenden individualmente.

Cada segmento, de color naranja rojizo, es alargado y puntiagudo, con una textura fibrosa.

Tiene un sabor ligeramente dulce y es rica en vitamina C y antioxidantes, por lo que suele emplearse para tratar problemas de asma y resfriados.

2. Salak o fruta de serpiente

El salak (o salacca zalacca) es una fruta tropical originaria del sudeste asiático, especialmente de Indonesia, Malasia y Tailandia.

Es conocida como fruta de la serpiente por la apariencia de su piel, que tiene una textura escamosa y brillante, similar a la de una serpiente. Su pulpa es cremosa y de textura similar a la de un ajo.

Además de su sabor distintivo, es rica en fibra, antioxidantes y vitamina C, lo que lo convierte en una opción saludable y deliciosa para quienes buscan probar algo diferente.

En Indonesia se le conoce como 'fruta picnic' por su facilidad para ser pelada y consumida, convirtiéndola en un acompañante perfecto para excursiones o paseos.

3. Mano de Buda

La mano de Buda es probablemente una de las frutas más extrañas. De la familia de los cítricos, destaca por su intenso aroma, gracias a su alta concentración de aceites esenciales.

Originaria de Asia Oriental, especialmente de China e India, este cítrico posee una forma única, que se asemeja una mano abierta con largos y delgados 'dedos'. En la cultura china, esta fruta es un símbolo de felicidad, longevidad y buena fortuna.

A diferencia de otros cítricos, esta fruta no tiene pulpa ni jugo. Su interior está compuesto por albedo (la parte blanca y esponjosa de los cítricos).

No se suele consumir directamente. Suele ser utilizada para perfumar habitaciones o templos y en cocina se usa su cáscara para añadir sabor a postres, infusiones o licores.

4. Carambola o fruta estrella

Originaria del sudeste asiático, se le conoce como fruta estrella por la forma de sus rodajas cuando se corta transversalmente.

Su aspecto inconfundible es su mayor atractivo. La carambola tiene una piel cerosa y lisa de color amarillo verdoso y una pulpa translúcida que combina sabores dulces y ligeramente ácidos, similar a una mezcla de manzana y uva.

En muchas culturas tropicales, la carambola no solo se valora como alimento, sino también como remedio casero para tratar dolencias como fiebre y dolores de cabeza, gracias a sus propiedades antioxidantes.

5. Fruta milagrosa o miracle fruit

La fruta milagrosa (Synsepalum dulcificum) recibe este nombre debido a su peculiar capacidad para transformar los sabores.

Así es, esta pequeña baya roja, originaria de África Occidental, tiene el poder de hacer que los alimentos ácidos, como un limón, sepan increíblemente dulces.

Esto se debe a una proteína llamada miraculina, que se adhiere a las papilas gustativas y altera la percepción del sabor ácido durante aproximadamente una hora.

6. Durián

Apodado el 'rey de las frutas' en el sudeste asiático, el durián es tan famoso por su sabor como por su controvertido olor.

Originario de países como Malasia, Tailandia e Indonesia, está considerada la fruta más pestosa del mundo. De hecho, en muchos países asiáticos, está prohibido comerlo en lugares públicos y en transportes como autobuses y trenes debido a su fuerte olor.

Los amantes del durián describen su gusto como una mezcla de dulce y ensalada, con matices de almendra, caramelo y un toque de queso. Para otros, su olor característico, que ha sido comparado con cebolla podrida o combustible, hace difícil siquiera acercarse a él.

Es rico en vitaminas del grupo B , potasio y fibra, y es conocido por ser una fuente de energía inmediata gracias a sus carbohidratos naturales.

7. Jackfruit

La jackfruit, fruta de jack o yaca, tiene el título de ser la fruta más grande del mundo que crece en un árbol. Originaria del sur y sudeste asiático, esta fruta puede llegar a pesar hasta 50 kg.

Bajo su gruesa cáscara verde y espinosa, se encuentran cientos de gajos dorados y carnosos con un aroma dulce y un sabor que recuerda a una mezcla de plátano, piña y mango.

Pero lo más sorprendente es su versatilidad: cuando está maduro es ideal para postres, pero en su versión verde es un potente sustituto vegetal de la carne, popular en la cocina vegana por su textura similar al pollo o al cerdo.

Además, contiene una cantidad significativa de proteínas para ser una fruta, lo que la hace especialmente atractiva en dietas vegetarianas.

8. Mangostán

También originaria del sudeste asiático, el mangostán es una fruta tropical aclamada por sabor delicado y sus propiedades beneficiosas.

Su cáscara gruesa y de color púrpura oscuro protege una pulpa blanca dividida en gajos, parecidos a los de una mandarina.

Su sabor es dulce y ligeramente ácido, que muchos describen como una mezcla entre piña, durazno y fresa.

En Tailandia, el mangostán es considerado un símbolo de hospitalidad, y su consumo se reserva para ocasiones especiales. Además, su cáscara seca se utiliza en la medicina tradicional para tratar infecciones de la piel y problemas digestivos.

9. Rambután

El rambután, una fruta de la familia de los lichis, llama la atención por su particular apariencia.

Originario de Malasia e Indonesia, su nombre proviene de la palabra malaya 'rambut', que significa 'cabello', en alusión a su piel rojiza cubierta de finos filamentos que se parecen pelos.

Su sabor tiene un delicado toque floral que combina perfectamente con su textura firme y refrescante.

Es rico en vitamina C , que ayuda a reforzar el sistema inmunológico, y contiene antioxidantes que combaten el envejecimiento celular. Además, es una fuente natural de minerales como el hierro.

10. Noni

El noni es una fruta que intriga tanto como divide en opiniones. Originaria del sudeste asiático y Polinesia, esta fruta ovalada de color verde amarillento es conocida tanto por sus beneficios medicinales como por su olor penetrante, que algunos describen como queso fermentado o pies sudados.

Es rico en vitamina C, potasio y compuestos bioactivos que se han estudiado por sus posibles efectos antiinflamatorios y analgésicos.

Es venerado en muchas culturas por sus supuestas propiedades curativas. Su sabor, amargo y algo terroso, es un contraste total con las frutas dulces convencionales, pero su jugo se ha convertido en un ingrediente popular en remedios naturales y suplementos.

Estas son solo un ejemplo de la cantidad de frutas exóticas raras que podemos encontrar alrededor del mundo. Lo que nos demuestra la gran la riqueza y diversidad de la producción vegetal del planeta.